Perfil de la diseñadora

Olga Piedrahita 

 

Olga Piedrahita es una diseñadora de moda colombiana, quien desde 1982 crea historias desde la costura.

 

Su diseño es un experimento continuo que se nutre de diferentes corrientes artísticas, conceptos abstractos, lecturas personales, sensaciones humanas y cotidianas que durante años han creado un sello inconfundible. 

 

Para Olga la moda es su forma de expresarse: desde su universo crea nuevos lenguajes estéticos y a menudo mezcla sus exploraciones con creativos diversos, como fotógrafos, chefs, escritores, pintores, ilustradores, entre otros.

 

La marca es urbana, creativa, vibrante y propositiva.


La Creadora y su Búsqueda.   

Olga Piedrahita nació en 1954 en la ciudad de Medellín y desde muy joven demostró pasión por el arte. Durante sus estudios de ballet clásico, desarrolló sensibilidad para el movimiento, el cuerpo, la música y la interpretación que la condujeron de una manera especial hacia el diseño de moda. 

En 1982 en Medellín nació "Taller Barroco" como concepto en busca de historias de texturas, materiales antiguos y cotidianos como manteles, bordados y terciopelo. También buscó el color a través de degradados y superposiciones con una apariencia antigua, siluetas rectangulares y trapecios, bajo la influencia de la era hippie, en la que el arte usable era una de sus principales características.   

En 1986 se mudó a Bogotá e integró la “Asociación Colombiana de Diseñadores” y trabajó con otros colegas en el nacimiento de moda estacional a través de "Tendencias". Desde entonces se posicionó como una de las principales diseñadoras de propuestas creativas del país, que la llevaron a una fase neorromántica, limpia y etérea, volátil y fluida, inspirada por Martha Graham e Isadora Duncan.   En 1990, decidió aplicar el concepto "menos es más", tan vacío como importante, del que nacieron siluetas elegantes con cortes geométricos, inspirados por Jean Moore, Mondrian, Gustav Klimt y Vasarelly.   Durante esta época, nació Colombiamoda, donde Piedrahita se colocó como una diseñadora controvertida, persistente y sólida con un concepto vanguardista.   Durante la década de los 90, la marca se consolidó estructural y técnicamente en el diseño de moda bajo el lema "Colombia Creativa", que se destacó por el uso de líneas, proporciones, armonía, ritmo y unidad en sus diferentes colecciones. Fue un período seguido por un importante proceso de desapego en la estructura artística del creador. 

Su investigación en telas arrugadas y plisadas en su laboratorio de moda la llevó a una técnica que se originó a partir del error y se convirtió en diseño.   En los comienzos del nuevo milenio, Piedrahita fue la invitada especial de Oscar de la Renta para el desfile de Balmain.  Más adelante, en la temporada de otoño-invierno de 2004, la diseñadora fue elegida junto a otros colegas para representar a Colombia en la "Pasarela Identidad Colombia" de Milán. La colección se inspiró en la selva amazónica, las vides y la lluvia de grillos  que fueron interpretadas por los rockeros amazónicos mezclados con taches de metal y rodilleras.

Sus siguientes años se centraron en entender a fondo las técnicas de costura, patronaje y construcción, para encontrar un lenguaje propio de deconstrucción y un método propio de creación. El plástico, el papel, la polisombra de arquitectura entre muchos otros, son elementos en los que la diseñadora ve mundos enteros: en el universo de la marca, la experimentación y la mezcla de opuestos es el punto de partida de cada nueva colección. No trabaja regida a un calendario de temporadas, porque siguen las temporadas internas de las emociones y los intereses propios: dialoga con la contemporaneidad observándola y proponiendo formas que hablan del futuro. Olga es visionaria y creadora. Pero siempre mantiene y defiende aquel sagrado lugar en el que solo se crea cuando la inspiración se manifiesta. 

Desde el 2007 y de la mano de su hija Danielle, Olga ha encontrado la medida de sus sueños: un taller- boutique pequeño en el que se hacen prendas de a una por una, con la espectativa de crecer en la profundidad de investigación de cada trabajo, en aumentar la cantidad de creativos con quienes colabora, en seguir dedicando tiempo a sus lecturas y a dar cuerda suelta a sus intereses particulares a partir de los cuales se llega finalmente a la creación de moda, desarrollando el concepto de moda GLOCAL que tanto la apasiona.

 

Danielle

Danielle nació en Medellín pero fue criada desde sus 2 años en la ciudad de Bogotá. Tiene más de 50% de su ADN antioqueño, generaciones atrás aparece la Guajira, más atrás Cuba, Francia, Estados Unidos y España.  Con esta mezcla de sangre,  Danielle reconoce que es una latinoamericana contemporánea, pero ante todo una mujer citadina colombiana. Es por esto que en su trabajo siempre el interés de aventurarse a conocer cada vez más de cerca, las profundas raíces de su país. 

 

Desde muy temprana edad estuvo sumergida en el mundo de la moda (literalmente desde bebé en una canasta de telas), de la mano de su madre Olga Piedrahita. De esta maravillosa casualidad, la causalidad de su inclinación por el diseño y de su interés por la creación, como forma de vida.

 

Después de graduarse de diseño industrial de la Universidad de los Andes, viaja a India donde trabaja en “The Gem Palace” de la mano del icónico Sanjay Kasliwal donde empieza a conocer el mundo de la joyería y el trabajo a mano y empieza a crear un concepto de lo exótico que la acompaña en sus sueños y viajes del este. 

 

En su vida profesional, Danielle tiene dos intereses: El de la producción creativa y ejecutica y el diseño personal. El primero existe desde el 2008 cuando vuelve a Colombia y ejerce desde la empresa Olga Piedrahita. Así conoció al fotógrafo Ruven Afanador y surgió un importante capítulo creativo de su vida. A su lado, han creado campañas de país con músicos como Aterciopelados y Chocquibotwn, talleres de fotografía para jóvenes fotógrafos, retratos de músicos y artistas,  los 60 años del aeropuerto el Dorado, entre otros.

 

Cuando la marea baja, Danielle busca la inspiración más allá de si misma. Le interesa ser quien diseña tejiendo historias, quien une talentos para crear productos, quien hace parte de la creación de un concepto GLOCAL, de Colombia para el mundo. Fue así como surgió la colección de broches y joyas de palma que ahora hacen parte esencial de su familia agrandada.